Como un espacio de contención recíproca, un homenaje a los seres queridos violentados o desaparecidos, una trabajo colectivo sanador y un lugar de encuentro de indudable valor terapéutico. Así describieron los usuarios del Programa de Reparación Integral Salud Mental, Prais, Concepción, el Mosaico-Memorial que se inició el segundo semestre de 2014 y que, a través de esta expresión de arte, busca preservar la memoria de las víctimas de violaciones a los derechos humanos cometidas durante la dictadura militar.
Este mural-mosaico, que ya está terminado, está situado a la entrada del establecimiento Prais, ubicado en Maipú 2180, frente a la plaza Acevedo de Concepción y su diseño y construcción es obra de un colectivo de hombres y mujeres afectados directamente por la represión política vivida en el país.
Esta inédita iniciativa surgió del Consejo de Usuarios Prais y contó con el apoyo del equipo profesional de Prais, la asesoría de profesionales del muralismo y la Dirección del Servicio de Salud de Concepción, expresó la encargada de este Programa. Lidia Inostroza.
Así, día a día, bajo la guía de la antropóloga cultural Carmen Durán, se constituyó un Taller de Mosaico Comunitario que funcionó regularmente desde 2014 a 2016 y donde se plasmaron las experiencias dolorosas, a veces traumáticas, de los integrantes del Taller y el contexto histórico en que ellas se generaron.
Así, semana tras semana, fragmento a fragmento de cerámica, vidrio, loza y material reciclado, se fue realizando el mural, se fueron reconstruyendo fragmentos de vidas y se rescató un hito relevante de nuestra historia reciente, que se refleja, entre otras imágenes, en estudiantes, obreros, mapuches, prisioneros con los ojos vendados y una tumba vacía que espera una respuesta sobre el paradero de los detenidos-desaparecidos.
Así lo explicó Loreto Heredia Burgos, miembro de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos de Concepción: “Participar en este mural, junto a personas que estaban viviendo el mismo proceso mío, te llena el corazón, porque sientes que estas entregando algo, un aporte para la memoria de las futuras generaciones”, expresó. En el Taller de Mosaico, acotó, “nosotros hicimos esta catarsis, donde cada uno expresó lo que vivió, de manera colectiva, las diferentes formas de tortura y de violaciones a los derechos humanos”.
El Director del Servicio de Salud Concepción, Dr Marcelo Yévenes, valoró esta iniciativa que “se transformó en un espacio terapéutico, para donde plasmar la memoria personal y colectiva y un recordatorio constante del respeto que se debe tener siempre por la vida y los derechos humanos”.