El ritual fue inspirado en un libro de cultos satánicos, pero al darse cuenta que su amigo no “revivía” decidieron hacerlo pasar como un crimen organizado. Al estilo de bandas de narcotráfico, metieron el cuerpo en bolsas negras y lo dejaron abandonado en una banca cercana a una catedral.
Este asesinato ocurrió el estado norteño de Chihuahua, México. Tres jóvenes asesinaron a su amigo de 24 años durante un ritual satánico, todo con la intención de que se convirtiera en un vampiro inmortal.