
Dormir menos horas al hacemos mayores es algo recurrente. De seguro hoy dormimos mucho menos que cuando teníamos 20 años. Pero, ¿por qué se produce este fenómeno?
Según avanza la edad, las personas van perdiendo la capacidad de conseguir un sueño continuo. Ya es recurrente sentir que no se duerme largo y profundo como en la adolescencia. Sin embargo, pese a la creencia popular, esto no se trata de algo patológico sino de la evolución natural de las distintas etapas de vida de un ser humano.