La alimentación es parte de la temática y ocupación profesional de un nutricionista, desde la gestación y en los primeros años de vida. Esto marcará un antes y un después en la salud del adulto. Sin embargo, ciertos comportamientos alimenticios no se suelen vincular a esta área, señalando más a problemas de comportamiento. Es común pensar que un niño no quiere comer simplemente por oponerse a sus padres o porque no tiene ánimo de hacerlo.