A los 20 años se puede dormir toda la noche como un lirón y despertar fácilmente a las 3 de la tarde, pero a medida que envejecemos dormimos menos y peor.
¿Suena triste? Sí, pero es parte del ciclo vital y del envejecimiento del organismo, según Ana Adan, doctora en Psicobiología de la Universidad de Barcelona.