Hay un conocido dicho que dice desayuna como rey, almuerza como príncipe y cena como mendigo. ¿Y la once dónde queda aquí? pues entre el “príncipe y el mendigo”. No obstante los chilenos suelen hacer de esa merienda un símil del desayuno y eso no está bien.
Una once puede llegar a aportar entre 1.000 y 1.200 calorías diarias, que, por la hora en que se consumen, no se alcanzan a utilizar y sólo se acumulan en el cuerpo, explicó la docente de Nutrición y Dietética de la Universidad del Pacífico, Claudia Narbona.
La experta explicó que la merienda debería aportar entre 200 y 300 kcal, como hasta hace algunos años, cuando la once era “normalmente un vaso de leche y medio pan con algún acompañamiento”. Ahora no es así.