Más chilenos podrían disfrutar de las playas artificiales en los próximos años, si los planes que proyecta el Ministerio de Obras Públicas llegan a buen puerto.
Según detalla La Tercera, este proyecto implicaría una inversión de 34 millones de dólares, más otros US$ 63 millones que serán destinados para edificar estos especiales balnearios.